« Lucidez: acepta tu fragilidad pero mira más allá de ella. Pon tu cuerpo de buen humor: ayúdale a encontrar calma y energía. Pacifica tus estados de ánimo: mantén tu mente como una vela en el viento. Y no olvides que vives en un mundo extraño: piensa en cambiarlo también. »
|
Christophe André
Estados del alma: Aprender sobre la serenidad |
Christophe André
Estados del alma: Aprender sobre la serenidad
|
« Los "fuertes" creen que los sensibles son débiles, y se sorprenden cuando descubren que no lo hacen: sólo tratan de estar callados, pero también saben cómo ir al frente con un vigor aún más eficaz ya que es inesperado... Otras características de todo tipo se han descrito en personas hipersensibles: su conciencia, su capacidad de concentración (en ausencia de distracciones externas), su capacidad para detectar pequeñas diferencias, su empatía, su capacidad de permanecer inmóvil durante mucho tiempo, su fuerte capacidad de respuesta a la cafeína, y también la mayor frecuencia en ellos de alergias y fiebres del heno, etc. Esta acumulación de detalles argumenta a favor de las especificidades biológicas y cerebrales probables, explicando la hipersensibilidad. Pero los hipersensibles tienen sobre todo una vida interior muy rica, mundos imaginarios intensos, desde la infancia. Necesitan momentos tranquilos más que otros para reconectarse consigo mismos, de lo contrario experimentan una sensación de alienación y agotamiento rápido. Les resulta difícil mantenerse constantemente en situaciones grupales, y la necesidad de hacerse a un lado regularmente: durante las vacaciones familiares, aspiran a reunirse regularmente solos para ir a dar un paseo, o leer tranquilamente en su esquina. De ahí la frecuencia en sus filas de artistas y poetas, que son casi todos hipersensibles. Esto a veces lleva a algunos al punto de la enfermedad mental. Porque también hay un lado oscuro a la hipersensibilidad: ansiedad y riesgo excesivo depresivo. »
|
Christophe André
Estados del alma: Aprender sobre la serenidad |
Christophe André
Estados del alma: Aprender sobre la serenidad
|
« De hecho, hay una influencia de los momentos del día en nuestros estados de ánimo. En un estudio en el que se pedía a los voluntarios que registraran regularmente durante varios días sus niveles de calma y energía a diferentes horas del día, nos dimos cuenta de que el mismo problema personal (preocupaciones de pareja, dificultad para perder peso...) se evaluó como más grave por la tarde que por la mañana. ¿Para qué? Porque en general, al final de la mañana, nuestro nivel de calma y energía es óptimo. Sin embargo, al final del día, tenemos más tensión acumulada (menos calma), y también menos energía (la fatiga comienza a sentirse). En el mismo estudio, considerar el problema después de una caminata de 10 minutos hizo que, de nuevo, fuera menos difícil de resolver. En ambos casos, se constató que estos cambios favorables en la sentencia correspondían (que los participantes no eran conscientes) a niveles más altos de energía y calma. »
|
Christophe André
Estados del alma: Aprender sobre la serenidad |
Christophe André
Estados del alma: Aprender sobre la serenidad
|